"Emprender a los 40+: Descubriendo el Camino hacia el Éxito después del Mundo Corporativo"
- Fabiola Leon
- 24 jul 2023
- 3 Min. de lectura

En la actualidad, el emprendimiento se ha convertido en una opción atractiva para muchas mujeres que buscan una nueva dirección en sus carreras profesionales después de haber pasado años trabajando en el mundo corporativo. Sin embargo, iniciar un negocio propio en la década de los 40 puede venir acompañado de una serie de retos y oportunidades únicas. Vamos a explorarlos a continuación.
Pros:
Experiencia y Conocimiento: Una mujer que ha trabajado en el mundo corporativo durante años acumula valiosa experiencia y conocimientos que pueden aplicar a su propio emprendimiento. Estas habilidades incluyen liderazgo, gestión de equipos, resolución de problemas y toma de decisiones informadas.
Red de Contactos: Después de haber pasado años construyendo una red de contactos en el mundo corporativo, emprender en esta etapa de la vida puede resultar más sencillo. Estas relaciones comerciales y profesionales pueden abrir puertas para encontrar proveedores, clientes y socios comerciales.
Conocimiento de la Industria: Las mujeres con experiencia en el mundo corporativo generalmente tienen un profundo conocimiento de la industria en la que han trabajado. Esto les permite identificar brechas en el mercado y oportunidades de negocio que pueden aprovechar para su emprendimiento.
Autonomía y Flexibilidad: El emprendimiento ofrece la libertad de ser tu propia jefa y tener mayor control sobre tu horario laboral. Esto puede ser especialmente atractivo para aquellas mujeres que buscan un mejor equilibrio entre su vida profesional y personal.
Pasión y Propósito: Emprender a los 40+ permite a las mujeres seguir su pasión y perseguir proyectos que realmente les importen. Este sentido de propósito puede brindar una mayor satisfacción y motivación en la vida laboral.
Contras:
Riesgo Financiero: Emprender conlleva un riesgo financiero significativo, y a los 40+ muchas mujeres pueden tener más responsabilidades financieras, como hipotecas o educación universitaria para sus hijos. Esto puede hacer que tomar la decisión de emprender sea más complicado.
Adaptación al Cambio: Después de muchos años en un entorno corporativo estructurado, adaptarse a la incertidumbre y la dinámica del mundo empresarial puede ser desafiante. Las habilidades y métodos que funcionaban en una gran empresa pueden requerir ajustes para un negocio propio.
Competencia con Emprendedores Jóvenes: En algunos sectores, las mujeres de más de 40 años pueden enfrentar una competencia feroz con emprendedores más jóvenes, especialmente en el ámbito tecnológico. La percepción de que las nuevas ideas provienen principalmente de la juventud puede ser un obstáculo a superar.
Capacidad Física y Energía: Emprender puede ser un proceso agotador que requiere mucha energía física y mental. A los 40+ puede que no se tenga la misma resistencia que en la juventud, lo que implica aprender a equilibrar la carga de trabajo y el autocuidado.
Miedo al Fracaso: Después de haber tenido una carrera exitosa en el mundo corporativo, el temor al fracaso puede ser más acuciante. Es importante reconocer que el fracaso es parte del proceso de emprendimiento y que puede brindar lecciones valiosas.
Emprender después de los 40 años puede ser un camino emocionante y gratificante para las mujeres que han trabajado en el mundo corporativo durante muchos años. Si bien existen desafíos y preocupaciones legítimas, también hay numerosos beneficios y oportunidades para aquellas que decidan dar el salto. Con una sólida experiencia, una red de contactos y un sentido claro de propósito, emprender puede ser una aventura gratificante que permita a las mujeres desarrollar todo su potencial y alcanzar el éxito en una nueva faceta de sus vidas.
Comments